Friday, October 30, 2009

Anderson y Salinger

¿Ven cómo los chicos del blog de la redacción de Letras Libres luego ponen vínculos a textos que les parecen interesantes? Hoy subieron uno que dirige a una conversación entre Wes Anderson y Arnaud Desplechin. La estaba leyendo y me topé con esto que le dice Desplechin a Anderson:

"The first time I had to introduce one of your films in Paris, it struck me that that you are to American cinema what J.D. Salinger is to American literature. You create a sort of pure cinematic world and the characters connect from one film to another and the films together are drawing a world that is constantly expanding. It seems so close in style to what Salinger did".

Y pues eso me recordó esto que yo había escrito acá.

La entrevista completa puede leerse acá.

Thursday, October 29, 2009

Un breve catálogo


Un grupo de adolescentes que pasan un fin de semana en una casa de campo o una pareja adulta que pasa por un momento difícil pero que se ve obligada a detenerse durante lo que creerán es momentáneamente en un hotel en un camino apartado y de difícil acceso o también en una cabaña en la profundidad del bosque o cerca de una playa fría o un grupo de invitados a una mansión de un hombre excéntrico que al principio no se toman en serio lo que sus sentidos les informan o una familia que se muda para habitar, o creen que para habitar, a una propiedad privada erigida sobre un antiguo camposanto de una civilización o cultura olvidada y resentida o una adolescente introvertida que a pesar de sí misma y de lo que cree conveniente se ve obligada por una u otra razón a inmiscuirse en situaciones que no le competen o un extraño que llega en la noche a una comunidad apartada, para su mal o para el mal de ellos, por ejemplo. Pero también está el horror psicológico y el horror de monstruos y el horror autoconsciente y el terror sobrenatural o el terror natural y catastrófico o el horror que viene de las estrellas o de las profundidades o de los espacios oscuros que se ocultan en la cotidianidad.

Tuesday, October 27, 2009

¿Obreros de la escritura?

Me prestaron Documentos de cultura, documentos de barbarie (vaya usted a saber por qué titularon así The political unconscious. Narrative as a socially simbolic act) un libro de hace veinte años, de Fredric Jameson. Lo estoy leyendo por curiosidad. Entiendo la mitad. Me faltan muchas horas de estudio. Y venía en el camión leyendo cuando finalmente me topé con un párrafo que entendí. Como un claro en el bosque, leí:

"No se puede sin deshonestidad intelectual asimilar la 'producción' de textos (o en la versión althusseriana de esta homología, la 'producción' de conceptos nuevos y más científicos) a la producción de bienes por los obreros industriales: escribir y pensar no son trabajos enajenados en ese sentido, y es indudablemente fatuo que los intelectuales traten de embellecer sus tareas -que pueden en su mayoría subsumires bajo la rúbrica de elaboración, producción o crítica de la ideología- asimilándolas al trabajo real en la línea de montaje y a la experiencia de la resistencia de la materia en el genuino trabajo manual".

El párrafo está escrito como una nota al margen sobre los errores que se cometen en los esfuerzos por configurar una "teoría materialista del lenguaje", cuyos orígenes, según entiendo, se encuentran en olvidar los límites de la metáfora que supone "producir" textos. El tono del libro de Jameson en general es así, aspirando a una especie de pureza intelectual en aras de, creo, objetividad conceptual y de subrayar la radicalidad de sus propuestas (como puede leerse desde el primer capítulo: "Este libro afirmará la prioridad de la interpretación política de los textos literarios [...] Es esta evidentemente una exposición más extrema que la modesta pretensión, aceptable sin duda para todo el mundo, de que ciertos textos tienen una resonancia social e histórica, a veces incluso política").

Creo que el párrafo del que hablo me llamó especialmente la atención porque por alguna razón a menudo pienso en la comparación que hacía Walser de su labor como escritor con otros trabajos, manuales todos ellos; no con el objetivo, creo, de "embellecer" su obra, sino de presentarla humildemente -así, se compara (sin identificar) con albañiles o agricultores, si no me falla la memoria. Por supuesto, Jameson tiene razón: escribir, por más callos que le salgan a uno o por más agotados que nos sintamos, no es un trabajo tan arduo como trabajar en una fábrica. En fin, venía pensando en eso en el camión, sin rumbo fijo.

Friday, October 23, 2009

Viernes por la noche


Fui a ver esa película donde actúa Meryl Streep junto a Stanley Tucci que no es El diablo viste a la moda (2006). Se trata de una película muy distinta donde Meryl Streep se ocupa de una de las artes menores, no la cosmética o la moda, sino la gastronomía, para convertirse eventualmente en una figura de poder en el imperio gastronómico. La historia del personaje de Streep, Julia Childs, se relata paralelamente a la de una joven que intenta formarse o realizarse a la sombra de esta gran figura. Una pequeña diletante, en realidad, que confía en que con empeño y entusiasmo, teniendo a la figura de la cocinera como deidad y su libro de cocina como Biblia (un poco como el ratoncito de Ratatouille), podrá realizarse y encontrarse (en la cocina). Como todas las películas que tienen como tema central una de estas artes menores, uno sale con una curiosa sensación de bienestar: la verdad es que uno acaba de pasar un buen rato. Como diría uno de los enemigos de la sociedad abierta, Platón, estas artes "adulatorias" (aquí leáse arte en el sentido de técnica) se ocupan no de nuestro bien sino que "captándose a la insensatez por medio de lo más agradable en cada ocasión, produce engaño, hasta el punto de parecer digna de gran valor". Una imagen de un pescado a la mantequilla: en la oscura sala del cine todos salivamos. "Así pues, la culinaria [¿pero es esto lo mismo que la gastronomía? Quizá Platón se refiere a la dietética] se introduce en la medicina y finge conocer los alimentos más convenientes para el cuerpo, de manera que si ante niños u hombres tan insensatos como niños, un cocinero y un médico tuvieran que poner en juicio quién de los dos conoce mejor los alimentos beneficiosos y nocivos, el médico moriría de hambre." Sobre la cosmética, Platón afirmó que es "perjudicial, falsa, innoble, servil, que engaña con apariencias, colores, pulimentos y vestidos, hasta el punto de hacer que los que se procuran esta belleza prestada descuiden la belleza natural que produce la gimnástica".
No anotaré aquí las razones por las que Popper coloca a Platón como un enemigo de la sociedad abierta (ni preguntaré en voz alta si eso de la sociedad abierta es realmente deseable) porque es viernes por la noche y no las tengo a la mano pero seguramente tenía algo que ver con La República y la visión utópica (según Popper, un anhelo) que tenía Platón de la misma. Sólo quiero anotar esta curiosa alimaña que recientemente alimenta varios de mis pensamientos, la sospecha.
Incidentalmente, hay un momento en la película en la que la joven que busca realizarse cocinando -y escribiendo al respecto en un blog- se decepciona de sí y de la figura a la que ha decidido seguir. Su paciente esposo, un arqueólogo, le pregunta qué es más importante: la persona de carne y hueso que fue Julia Childs o la persona que imaginó la joven que fue Julia Childs. La joven escritora que está por realizarse en la cocina, le contesta que, sin duda, la que importó fue la que imaginó.
Si yo fuera un crítico de la cultura serio haría un análisis más extenso sobre el lugar que ocupan los medios periodísticos y electrónicos en estas dos narraciones (El diablo viste... y Julia & Julie) así como el curioso lugar que ocupan los maridos o las figuras masculinas en ambas historias (en una de ellas Tucci es representado como homosexual y en otra como un burócrata con una satisfactoria vida sexual; en cuanto a las jóvenes: en El diablo..., la contraparte masculina es, interesantemente, un chef que puede ocupar tiempo de sus conversaciones sobre el grosor de una papa frita y que eventualmente se frustra sexualmente, y en Julia... es un arqueólogo quien también se frustra sexualmente). Pero no estamos para estas cosas, la verdad.

Una especie de convergencia


Thursday, October 22, 2009

"Get a life!"

Le estaba contando a David que saliendo de la oficina iré a rentar Adventureland (me la recomendó y había leído en Mcsweeney's Recommends que, bueno, la recomiendan). La última vez que había pasado al Videodromo la había visto pero en su lugar renté Re-Animator, basada en el texto de Lovecraft sobre las aventuras de Herbert West, obsesionado con reanimar cuerpos. Desde entonces me quedé con la espinita y total que eso le contaba y le preguntaba si no le parecía curioso que el protagonista de Adventureland participara en Zombieland, aún por estrenarse, y que si, a la vez, no le parecía también curioso que la chica que sale en Zombieland apareciera en Superbad (una película que vi con David y Adriana, dueña, incidentalmente, de un gato que es como un muerto viviente), del mismo director de Adventureland. Antes de perder su paciencia, David me dijo que era curioso también que -pensando en los muertos vivientes de Zombieland- la chica que sale en Adventureland es la misma que sale en esa otra película de muertos vivientes que es Twilight (que no he visto pero entiendo que es muy popular). En fin, en algún momento de esta conversación David me encomió a que me consiguiera una vida. En lugar de eso, seguí bobeando en la red y en la lista de datos inútiles que ofrece IMDB leí que en un momento dado de Adventureland aparece el centro comercial donde los personajes de la versión original de The Dawn of the Dead (1978) se refugian, el Monroeville Mall que se encuentra a las afueras de Pittsburgh, PA. Aquí una imagen del centro comercial:

No sé si alcancen a distinguir el nombre de la tienda, Lazarus. Pueden encontrar más imágenes acá.

Tuesday, October 20, 2009

Más sobre La guerra fue breve

Busqué en mi librero, en el estudio, en la sala de televisión y no encontré mi ejemplar de La guerra fue breve, del cual hablé, poco, hace un par de entradas. Copiaré lo que quería copiar más tarde, pensé. Veré televisión, me dije. Pero camino a la sala de televisión volví a repasar en mi cabeza los lugares donde pude haber dejado el libro y sin mucho drama, me puse a buscar de nuevo el libro. Revisé una vez más en mis libreros (quizá no lo acomodé en la B de Bernal sino en la G de Granados) sin resultados y comencé a percatarme del animalillo maligno que se había hospedado en mi mente, la obsesión. No vería la televisión hasta que diera con el libro. Finalmente lo encontré, detrás de unos libros y después de un buen rato -alguien lo acomodó allí- no sin perder algunos pelos.
Hoy una persona cercana a mí (mi madre) me regaló un producto contra la caída de cabello, este:
Aquí muestro sólo las ampolletas. También viene un shampoo. Y ahora, sin más rollo, les regalo algunos fragmentos del texto "Calvicie", que pueden leer íntegro en La guerra fue breve:

Uno quisiera olvidarse de uno mismo, pero la calvicie es un recordatorio constante de que tú eres tú y estás cambiando; día a día te ves peor que antes, te sale panza y los excesos te producen crudas más denigrantes.
***
Hasta ahora, nadie ha explicado satisfactoriamente por qué a los hombres se les cae el pelo más que a las mujeres, y por qué sólo ciertos hombres empiezan a perder el pelo prematuramente. Se ha hablado de una disminución en la producción de una hormona; mas, para explicar la calvicie, a uno no se le ocurre, al final, otra razón que el destino. La herencia genética y el destino, que a la mera hora no sino la misma cosa.
***
Al hombre de éxito se le suele representar con una melena abundante que se deja crecer a capricho; mientras que los calvos son sinónimo de amargados o perdedores. Pero más de un calvo nos ha dado una sorpresa, al estar rodeado de jóvenes hermosas que comparten su discreto encanto y fortuna.
***

Bernal Granados nos regala, además, esta cita de Prosas apátridas, de Julio Ramón Ribeyro: "Todas las calvicies son desgraciadas, pero hay calvicies que inspiran una profunda lástima. Son las calvicies obtenidas sin gloria, fruto de la rutina y no del placer, como la del hombre que bebía ayer cerveza en el Violín Gitano. Al verlo, yo me decía: ¡en qué dependencia pública habrá perdido este cristiano sus cabellos!".

Mañana comienzo mi tratamiento capilar, con toda la tristeza del mundo.

Monday, October 19, 2009

Óscar Benassini se está muriendo...

...¡por enseñarte a hacer revistas!

Para más información sobre el Taller de Creación de Revistas, impartido en Hermosillo (esa capital de la cultura que alberga la hermosa Bahía de Kino), pueden visitar el siguiente vínculo. ¡No dejen pasar esta oportunidad!

La guerra fue breve

Ocurre que el fin de semana conseguí la cuarta temporada de The West Wing y empecé a verla. Hubo un día que a las tres de la mañana me descubrí pegado frente al televisor después de varias horas, aún entretenido. En algún momento de dicho trance, sin embargo, pude terminar La guerra fue breve, de Gabriel Bernal Granados, un curioso libro de ensayos y viñetas autobiográficas. Algunas curiosidades aparte -como tener en las manos un libro de una editorial escrito por uno de los editores de la misma- debo decir que disfruté mucho el libro. Y esto, también debo decirlo, lo escribo a las últimas horas de un día laboral donde ya contemplo irme corriendo a casa para ver el resto de la cuarta temporada de The West Wing. Anoto unas líneas rápidamente. 1. Dejé el libro en casa, así que lo poco que sigue es de memoria. 2. Recuerdo especialmente "Castidad", el texto que, a su modo, le da título al libro. 3. Recuerdo mucho el texto sobre una vecina. 4. Recuerdo y comprendo empáticamente el texto dedicado a la calvicie. 5. La impresión general de que se está ante un libro escrito para escritores, ¿tiene esto sentido? 6. La impresión general de haber perdido el asombro por lo que uno escribe y por descubrir que uno es capaz de escribir, de saberse ante un juguete nuevo -pero, en este caso, sin caer en el engolosinamiento. 7. Es un buen libro, pero, no olvido, ya quiero irme corriendo a ver The West Wing; esto dice más, claro, de mí y del estado general de las cosas, que del libro de Bernal Granados. 8. Apenas pueda copiaré algunos fragmentos, para el disfrute de todos.

Friday, October 16, 2009

Hasta en la sopa, los zombies

Con ocasión de las festividades de Halloween, el comedor Barracuda ofrece a sus comensales una serie de platillos especiales, entre ellos un hot dog con la misma salsa que le ponen a las alitas y varios quesos. Los han bautizado como "Levanta zombies".

También venden pan de muerto.

Thursday, October 15, 2009

Más muertos vivientes en los medios

Otro de mis investigadores de tiempo completo, Nicolás Cabral, me dio la pista para dar con esta entrevista que le hicieron a Paul Virilio en La Nación. A la pregunta de si podrá la ciencia vencer a la muerte ("varios equipos de investigadores han logrado identificar un gen del envejecimiento"), Virilio contesta:

"La vida es una pasión contagiosa. Ni la ciencia ni -sobre todo- las tecnologías pueden abolir los riesgos que ella comporta. Vivir es peligroso ¡y aun mortal! Por ende, es imposible separar la vitalidad de la mortalidad... a menos que pretendamos crear de pies a cabeza una generación de muertos vivientes, de zombis, que serían para las sociedades futuras lo que fue el esclavo para las pretéritas. El superhombre del eugenismo finisecular es, en realidad, un "subhombre", un infrahumano y, sin duda, un transhumano. Luego de la búsqueda astronáutica del extraterrestre en el siglo XX, se prepara para mañana la búsqueda del extrahumano. Parece que se prefiere el ser verosímil, el clon exótico, al ser semejante. Esperamos asistir a la sucesión del prójimo por ese ser lejano, verosímil, que es producto de la ingeniería genética... Pero siempre es la misma ilusión lírica del sabio loco, la gran ilusión colonial de las biotecnologías: tras haber conquistado lejanas tierras y colonizado a pueblos exóticos, se quiere conquistar el "libro de la vida" explorando el mapa del genoma humano. ¡Ahora se pretende inventar una humanidad mejorada, una poshumanidad! Siempre la misma sed de dominar, de colonizar a los vivos".

Ayer, viendo y leyendo, en The Superficial, encontré otra curiosa mención de muertos vivientes. Al comparar a Kim Kardashian con Shauna Sand, se afirmó: "Kim Kardashian doesn't look like she died five years ago but continues to walk among us in search of more collagen".

Finalmente, hoy salió este texto de Charlie Higson en The Guardian, titulado "The truth about boys, girls, zombies, vampires and sex".

Tuesday, October 13, 2009

Un extraño en nuestro cuerpo


David Miklos me pasa este texto de Xan Brooks, en The Guardian, con ocasión de los 30 años de Alien. Un párrafo:

But there is an argument that these films actually reflected wider concerns. There was a growing sense in the 70s that a range of environmental factors – be it pollution, pesticides, food additives, man-made cancers – meant that we were no longer in control of our bodies. That our sense of self can change, mutate and become monstrous.

Aquí pueden ver la escena extendida del "nacimiento". Curiosamente, ayer mi jefe nos pasaba este video, y reía y reía.

Monday, October 12, 2009

Otro fin de semana de soltero


Regresaba caminando a mi casa, leyendo, cuando me topé con una frase que decía "empty evenings spent staring at a screen".

También, de The Day of the Locust de Nathanael West: "Every day of their lives they read the newspapers and went to the movies".

El fin de semana vi cuatro películas.

Friday, October 09, 2009

Un poco sobre Libros Magenta


No sé por qué inicié con La ciudad imaginada de Alberto Chimal -había avanzado un poco en La guerra fue breve, de Bernal Granados, uno de los editores de Libros Magenta (Ana Rosa González Matute, la otra, también tiene un libro publicado en la editorial, que iniciaron en 2006, En sueños surgen las responsabilidades) y lo estaba disfrutando mucho, pero lo dejé un rato. Quizá inicié con el libro de Chimal (y con esto quiero decir que es el único de los Libros Magenta que he terminado) porque, en un breve descanso en el trabajo me leí de corrido el cuento que le da título a la colección, "La ciudad imaginada". Nunca había leído nada de Chimal (cosa rara, pues a menudo paso por su sitio Las historias), o al menos tenía la impresión de que nunca lo había hecho. ¿Por qué es esto? Quizá nunca había leído sus cuentos ordenados, pensados para un volumen. Y se leen bien, así. Pocos días después de leer ese texto en la oficina -como sólo puede leerse en la oficina, con otras lecturas y pendientes- anoche, de regreso a casa en el Metrobús, pude leer el resto de los textos que conforman el libro. Y son buenas historias, fantásticas, con un toque de slipstream (sólo uno de sus textos, "La balanza", me costó trabajo).

Para más información sobre Libros Magenta y su catálogo pueden visitar su sitio electrónico, acá. Les adelanto que el de Bernal Granados se ve bien y que publicaron una colección de ensayos de Guy Davenport, ¿Qué son las revoluciones? Pero bueno, habremos de leerlos.

Entrada 1221

Sergey Brin, presidente de tecnología y cofundador de Google, escribe acá, en el New York Times, sobre un paso más en un sueño ilustrado, en un tono que llama a la congregación, a ratos con ecos bíblicos.

Ahora se me ocurre. Hay libros, libros antiquísimos, como la Biblia, la Ilíada, o el Corán, que por más bibliotecas que se hayan quemado, no se han perdido en la historia. ¿Es esto una especie de supervivencia del libro más fuerte, el libro apoyado por grupos de poder?

Tuesday, October 06, 2009

Nada, tonterías que leo

Leo esto, en la nueva The Believer (lo que puede leerse en línea). Un párrafo:

“You can have your picture taken with him!” she shouted in English as we passed. We recognized her companion then. He was the old guy smoking a cigar on the cover of the Lonely Planet guide to Cuba.

Busqué la portada de ese Lonely Planet. Encontré estas dos imágenes: la primera y la segunda. El texto, por alguna razón, me hizo pensar en aquella ex-novia que quería que fuéramos a Cuba. También, alguna vez, quiso que fuéramos a Nueva York. Nunca hicimos un viaje juntos. Eventualmente, creo recordar, hizo su viaje a Cuba con la persona con la que ahora está casada. También me hizo pensar en la Cuba descrita por Houellebecq en Plataforma, la predicción de la próxima desaparición de la Cuba del "exotismo político". Me asusta un poco que no sea realmente hasta este texto que encuentro cierto interés en la Cuba turística. Me temo que se debe a la rara mezcla de ignorancia e imprudencia que se desprende de los diálogos entre Strand y Wallenstein (que, a su vez, me recuerda a la ignorancia de Will y Hand de Y.S.K.O.V. de Eggers; y que, a su vez, me recuerda la mía) pero que está acolchonada en la informativa crónica que le da cuerpo al artículo.
La verdad es que no tengo interés alguno en visitar Cuba, no pronto.
Por lo demás, lamento que el texto sobre turismo en Transilvania, The Undead Travel ("How an English Dracula Revived the Romanian Tourist Industry"), de Avi Davis, no pueda leerse sino en la versión impresa.
Un futuro en el que a México vengan turistas interesados en experimentar "el riesgo" y "el peligro" de falsos narcotraficantes.

Monday, October 05, 2009

Laputa

Hasta ahora se me ocurre que la "Cloud City" de Star Wars Episode V podría ser un descendiente de Laputa de Swift, ese lugar donde viven "absent-minded technologists". Se me ocurre hasta ahora, claro está, porque he leído mal Los viajes de Gulliver, a diferencia de, digamos, Eduardo Charpenel.
En fin, bobeando, veía esto que me pasó Óscar y de allí saqué la imagen, del libro Drawings on Geology, es un dibujo anónimo. Llegando a casa revisaré la tesis Charpenel para ver qué dice de Laputa.

***
Todavía no he revisado aquello pero seguí viendo ilustraciones y encontré estas otras dos, una del infierno de Dante hecha por un anónimo del siglo XV (es raro que a diferencia de otras versiones, por ejemplo la de Botticelli, ésta parezca colocarse en una geografía real -con sus montañitas alrededor y tal). En esta otra entrada recordaba al Chatwin que compara el cono invertido de nuestro continente, cada vez más al sur, hacia Tierra del Fuego, con la "montaña" del mítico Antictono (la contra-tierra) del que habla Dante -y del que se habla desde los Pitagóricos, según me doy a entender, más o menos, en la red.

La siguiente es de un tal Mark Dion, de 2001, titulada "Viaje a través del tiempo hacia la ciudad bajo el basurero". Que no sólo me hace pensar en Santa Fé, en la Ciudad de México (que, como es bien sabido, está construida sobre un antiguo, pero no tan antiguo, basurero) sino en todo ese subgénero de películas de horror sobre casas encantadas o "embrujadas" colocadas sobre antiguos cementerios (indios o no), esos pueblos sumergidos bajo el agua de una presa o, sencillamente, en el viaje a través del tiempo que es la arqueología. Y, obviamente, en The Rats in The Walls de Lovecraft.

De algún modo todo esto aún tiene que ver con las mentes ilustradas y los "absent-minded technologists" de Laputa.

Sunday, October 04, 2009

El término zombi utilizado como metáfora, en los medios

Hoy en un texto de opinión escrito por Juan E. Pardinas para el diario Reforma, titulado "¿Calderón contra los zombis?" puede encontrarse, una vez más, el término utilizado como tropo para describir a Luz y Fuerza del Centro: "Es una empresa zombi, un muerto viviente que requiere recursos adicionales para existir".

Luz y Fuerza, afirma Pardinas, se encuentra en quiebra técnica, es decir, "que el total de sus ingresos no es sufiente para cubrir sus deudas y otras obligaciones de pago".

El texto de Pardinas puede reducirse a una advertencia sobre el mal uso de términos -comparándolo con Obama a quien la extrema derecha de Estados Unidos califica de "comunista", como si "comunista" fuera un insulto o descalificativo a priori, defiende a Calderón a quienes lo "acusarán" de privatizador o neoliberal (Pardinas entrecomilla estos términos). Así, una vez más, acude al término zombi para hacer claro su punto:

"Luz y Fuerza Central es un cadáver ambulante. Si Calderón decide agarrar por los cuernos al zombi, le ocurrirá algo similar que a Obama. No lo acusarán de 'comunista', pero sí de 'privatizador' y 'neoliberal'".

Yo también creo que el uso de términos es algo que debe realizarse con cuidado, procurar no tomar el todo por la parte y tal. Se me ocurre ahora lo curioso que es descalificar a una empresa porque requiere más recursos de los que produce para existir, llamarla un "muerto viviente". (que, vamos, es lo mismo que decir viviente). ¿No somos todos eso, finalmente? Al menos sé que mis ingresos no son suficientes para cubrir mis deudas o el resto de mis obligaciones de pago. Creo, pues, que ya es hora de que se cambie el tropo de zombi por algo más cercano, una metáfora más sencilla de comprender. Se crearían menos confusiones. Propongo "capitalista". O "ser vivo que necesita más, siempre, aunque no lo necesite".